Deportado por salafista el imán de Figueres
Su legado es más mujeres tapadas, adolescentes aisladas y la comunidad más cerrada.
La orden de expulsión se emitió el 8 de agosto de 2023, después de que los servicios de inteligencia españoles le consideraran un predicador de la ideología salafista-wahhabita, catalogada como extremista por las autoridades. La Policía Nacional ejecutó la expulsión el pasado enero.
Azougah acumulaba un largo historial de antecedentes delictivos en la comarca del Alt Empordà, con múltiples detenciones por parte de la Guardia Urbana, los Mossos d'Esquadra de la comisaría de Roses y la unidad antiterrorista de la Policía Nacional. Las autoridades le consideraban un individuo potencialmente peligroso para la seguridad pública.
Sospechas de los vecinos
Azougah acumulaba un largo historial de antecedentes delictivos en la comarca del Alt Empordà, con múltiples detenciones por parte de la Guardia Urbana, los Mossos d'Esquadra de la comisaría de Roses y la unidad antiterrorista de la Policía Nacional. Las autoridades le consideraban un individuo potencialmente peligroso para la seguridad pública.
Desde hace unos años @ajfigueres se notan mucho estas pausas de Navidad. Alumnos que no vuelven, alumnos alegres que vuelven gatos y con pañuelo. Se cree que hay un #imam muy integrista; todo el mundo lo sabe pero nadie se atreve a hacer nada. https://t.co/HTLUKaZFac
— Pequeño Comité 🏳️🌈 (@petitcomite_) January 14, 2025
El testigo de Hanan Serrouck
En una entrevista publicada el 19 de noviembre de 2024 Emporda.info, la activista y escritora Hanan Serroukh aborda la presencia y normalización del islamismo en Figueres. Serroukh explica cómo este fenómeno ha transformado la ciudad, haciendo que aspectos como el velo islámico se conviertan en una barrera que separa comunidades.
Según ella, esta realidad no ha sido fruto de un proceso natural, sino de una creciente influencia de imanes radicales que limitan la libertad individual. Considera que estos líderes religiosos desempeñan un papel clave en la normalización de prácticas que perpetúan la desigualdad de género y la división social.
Serroukh relata su propia experiencia y cómo la llegada de un imán a Figueres le cambió la vida a los 11 años: se le prohibió ir a la escuela, a atletismo, a natación ya tener ninguna relación con no musulmanes. Con sólo catorce años tuvo que escapar de un matrimonio forzado en Figueres.
Todas las vivencias le han dado una perspectiva crítica sobre la situación actual, en la que considera que la imposición de ciertas prácticas religiosas está llevando a una regresión en los derechos de las mujeres. Además, apunta que existe un silencio generalizado sobre el tema por miedo a ser tildado de racismo o islamofobia.